Datos y cifras
Se calcula que en el mundo hay entre 6 y 7 millones de personas infectadas por el Trypanosoma cruzi, el parásito causante de la enfermedad de Chagas, la mayoría de ellas en América Latina.
La infección por Trypanosoma cruzi se puede curar si el tratamiento se administra al poco tiempo de producirse la infección.
Hasta un 30% de los enfermos crónicos presentan alteraciones cardíacas y hasta un 10% padecen alteraciones digestivas, neurológicas o combinadas que pueden requerir un tratamiento específico.
El control de vectores y otras estrategias destinadas a reducir la transmisión que estos producen son los métodos más útiles para prevenir la enfermedad de Chagas en América Latina.
Los análisis de sangre son fundamentales para prevenir la infección por transfusiones o trasplantes de órganos en todo el mundo.
La detección y el tratamiento de niñas infectadas y mujeres infectadas en edad fértil es clave, además del cribado de los recién nacidos y otros hijos de madres infectadas que no hayan recibido antes tratamiento antiparasitario.
La enfermedad de Chagas, también llamada tripanosomiasis americana, es una enfermedad potencialmente mortal causada por el parásito protozoo Trypanosoma cruzi (T. cruzi).